Cruda: no ha sido sometida a procesos de sobrecalentamiento (más de 40 º) ni pasteurización; de este modo, logramos mantener inmaculadas todas las vitaminas, nutrientes y enzimas, además de sus extraordinarias cualidades gustativas y olfativas.
No homogeneizada: jamás mezclamos ni homogeneizamos mieles naturales de diferentes áreas geográficas o florales, porque nuestro objetivo permanente es mantener la esencia y pureza durante todo el proceso de manejo.
Pura: la producen las abejas mediante el proceso natural de libación de polen, néctar y secreciones de plantas e insectos chupadores, para proceder después a su transformación y almacenamiento en los panales del interior de la colmena; se trata de un orden productivo carente de la influencia de factores ajenos a los que la propia naturaleza proporciona.
No filtrada: es la garantía para la conservación permanente de todas las cualidades naturales de origen y de este modo obtener un producto natural único.
Sin azúcares añadidos: contiene únicamente azúcares naturales saludables propios de una miel natural no adulterada.